Every year on April 23rd, the streets of Terrassa burst into color, literature, and romance as the city celebrates Sant Jordi’s Day, one of the most beloved traditions in Catalonia. This special day, honoring Saint George—the patron saint of Catalonia—is often compared to Valentine’s Day, but with a unique cultural twist that combines love and books.
In Terrassa, as in other Catalan towns, the tradition is for men to gift a red rose to their loved ones, while women return the gesture with a book. Nowadays, it’s common for both gifts to be exchanged regardless of gender, making it a celebration for all ages and relationships—romantic or otherwise.
Throughout the city, especially along Raval de Montserrat, you’ll find bookstalls, florists, and cultural activities. Local authors often appear to sign books, while schools and community groups organize storytelling, poetry readings, and live music. The festive atmosphere is both warm and vibrant, with the scent of roses and the buzz of readers filling the air.
Terrassa’s historic charm, combined with the community’s passion for literature and tradition, makes Sant Jordi a truly magical day. Whether you’re buying your first rose, discovering a new novel, or simply strolling through the decorated plazas, Sant Jordi in Terrassa is a heartfelt reminder of the power of stories—and of love.





















El Día de Sant Jordi en Terrassa: Una celebración de amor y cultura
Cada 23 de abril, las calles de Terrassa se llenan de color, literatura y romanticismo con la celebración del Día de Sant Jordi, una de las tradiciones más queridas de Cataluña. Este día especial, que honra a San Jorge —patrón de Cataluña—, se compara a menudo con el Día de San Valentín, pero con un giro cultural único que une el amor y los libros.
En Terrassa, como en otras localidades catalanas, la tradición consiste en que los hombres regalan una rosa roja a sus seres queridos, mientras que las mujeres corresponden con un libro. Hoy en día, es habitual que ambos obsequios se intercambien sin importar el género, convirtiéndolo en una celebración abierta a todas las edades y tipos de relación —ya sean románticas, familiares o de amistad—.
Por toda la ciudad, especialmente en el Raval de Montserrat, se instalan puestos de libros, floristerías y se organizan actividades culturales. Autores locales firman ejemplares, mientras que escuelas y entidades comunitarias presentan cuentos, recitales de poesía y música en vivo. El ambiente festivo es cálido y vibrante, con el aroma de las rosas y el murmullo de los lectores llenando el aire.
El encanto histórico de Terrassa, combinado con la pasión de su gente por la literatura y la tradición, hacen del Día de Sant Jordi una jornada verdaderamente mágica. Ya sea comprando tu primera rosa, descubriendo una nueva novela o paseando entre plazas decoradas, Sant Jordi en Terrassa es un recordatorio del poder de las historias… y del amor.
